Galpón Piedrabuenarte, ¡Bienvenida sin que me inviten!

Llegué a buscar el galpón a través de una conocida, que me aseguraba que me iba a encantar, que un lugar enorme, que arte, que ganas de hacer cosas, que buena onda, que encima me quedaba cerca…Hasta ahí sonaba «bien», de esas cosas que tratás de archivar en ese espacio mental donde guardás las cosas que no tenés que olvidar, pero que automáticamente olvidás (el turno con el médico, el apellido del autor, la dirección de donde estás yendo, todo eso…). Lo que no imaginaba era que el Galpón Piedrabuenarte era ESO, lo que es…¡Es fantástico! Seguir leyendo